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Reunió Josué a todas las tribus de Israel en Siquem, y llamó a los ancianos de Israel, sus príncipes, sus jueces y sus oficiales; y se presentaron delante de Dios.
a. Esto puede o no puede ser parte de la misma despedida descrita en Josué 23. No se menciona un lugar de reunión específico en Josué 23, así que podría haber sido parte de la misma reunión en Siquem.
Y dijo Josué a todo el pueblo: “Así dice Jehová, Dios de Israel: ‘Vuestros padres habitaron antiguamente al otro lado del río, esto es, Taré, padre de Abraham y de Nacor; y servían a dioses extraños. Y yo tomé a vuestro padre Abraham del otro lado del río, y lo traje por toda la tierra de Canaán, y aumenté su descendencia, y le di Isaac. A Isaac di Jacob y Esaú. Y a Esaú di el monte de Seir, para que lo poseyese; pero Jacob y sus hijos descendieron a Egipto. Y yo envié a Moisés y a Aarón, y herí a Egipto, conforme a lo que hice en medio de él, y después os saqué. Saqué a vuestros padres de Egipto; y cuando llegaron al mar, los egipcios siguieron a vuestros padres hasta el Mar Rojo con carros y caballería. Y cuando ellos clamaron a Jehová, él puso oscuridad entre vosotros y los egipcios, e hizo venir sobre ellos el mar, el cual los cubrió; y vuestros ojos vieron lo que hice en Egipto. Después estuvisteis muchos días en el desierto. Yo os introduje en la tierra de los amorreos, que habitaban al otro lado del Jordán, los cuales pelearon contra vosotros; mas yo los entregué en vuestras manos, y poseísteis su tierra, y los destruí de delante de vosotros. Después se levantó Balac hijo de Zipor, rey de los moabitas, y peleó contra Israel; y envió a llamar a Balaam hijo de Beor, para que os maldijese. Mas yo no quise escuchar a Balaam, por lo cual os bendijo repetidamente, y os libré de sus manos. Pasasteis el Jordán, y vinisteis a Jericó, y los moradores de Jericó pelearon contra vosotros: los amorreos, ferezeos, cananeos, heteos, gergeseos, heveos y jebuseos, y yo los entregué en vuestras manos. Y envié delante de vosotros tábanos, los cuales los arrojaron de delante de vosotros, esto es, a los dos reyes de los amorreos; no con tu espada, ni con tu arco. Y os di la tierra por la cual nada trabajasteis, y las ciudades que no edificasteis, en las cuales moráis; y de las viñas y olivares que no plantasteis, coméis.’“
a. Esto es una profecía, porque Josué comienza diciendo Así dice Jehová, Dios de Israel. Aunque no hay nada profético en este pasaje de apertura. Profecía no es necesariamente una predicción del futuro. Simplemente puede ser una palabra única, directa y espontanea de parte de Dios.
i. Con frecuencia queremos “sobrenaturalizar” la obra de Dios. El don de profecía puede operar en una forma poderosa, aunque natural.
b. Y yo tomé a vuestro padre Abraham del otro lado del río: Antes de que Dios rete a Israel, Él les recuerda de Su fidelidad. Les da una breve lección de historia, que les dice esto.
c. Hay algo falta en la revisión de Dios de la historia de Israel: Extrañamente sus errores son olvidados. Después, Dios dijo y no me acordaré más de su pecado (Jeremías 31:34). Aquí, parece que Él ha olvidado el pecado pasado de Israel.
i. Como sea, se nos dice donde comenzaron todos – como idolatras, incluyendo a Abraham. Las leyendas judías dicen que Abraham adoró al Dios verdadero desde su juventud, y tienen historias interesantes acerca de Abraham rompiendo todos los ídolos de la tienda de ídolos de su padre, pero no tenemos una razón bíblica para creer que son verdad.
Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová.
a. Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad: Este no fue un salto ciego de fe. Ellos vieron la obra de Dios y experimentaron Sus bendiciones, así que tuvo sentido para ellos exclusivamente servir a Dios quien ha hecho muchísimo por ellos.
b. ¡Servid a Jehová! Aun para nosotros, esta es una parte difícil – permanecer fieles a Dios después de haber recibido mucha bendición de Él; la facilidad que viene con la bendición puede ser un enemigo sutil de servir a Dios con integridad y en verdad.
i. “La mejor prueba de integridad no es siempre la hostilidad abierta de los enemigos, porque esto a menudo agarra las energías del combate, mientras que al mismo tiempo aclara el camino del deber. Mucho menos es a la hora del triunfo sobre los enemigos, entonces no hay tentación de rebelarse. La verdadera prueba de nuestra fidelidad a Dios es en la mayoría de los casos nuestro poder de continuar con firmeza en un curso de conducta cuando la emoción de conflicto es removida, y los enemigos con los que contendemos son los atractivos traicioneros de la comodidad y la costumbre en el mismo lugar que los deberes de ala vida.” (Redpath)
Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.
a. Escogeos hoy a quién sirváis: Josué les ordena escoger a quien servirán, no si van a servir. Todos serviremos a alguien – ya sea el diablo (intencionalmente o no), o al Señor. Realmente no se nos da la opción de no servir a nadie.
b. Pero yo y mi casa serviremos a Jehová: Josué, un hombre sabio, ve la situación de forma sensible – él hace la elección inteligente de decir pero yo y mi casa serviremos a Jehová.
i. Josué también entendió que él, como sacerdote de su familia, estaba cargado con la responsabilidad de ver que su casa completa sirviera a Jehová. Él tenía la tarea de representar a su casa completa delante de Dios.
c. Pero yo y mi casa indica que Josué estaba determinado en este curso no importando lo que pensara cualquier persona. Su relación con Dios no estaba basada en alguna persona, sino solo en el Señor, y él serviría a Dios no importando lo que los demás hicieran.
d. Dentro de la declaración de Josué de que él va a servir a Jehovásolamente. Él no va a servir a Jehováy alguien o algo más. Había un Dios en su vida, y ese Dios era el Señor.
Entonces el pueblo respondió y dijo: “Nunca tal acontezca, que dejemos a Jehová para servir a otros dioses; porque Jehová nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre; el que ha hecho estas grandes señales, y nos ha guardado por todo el camino por donde hemos andado, y en todos los pueblos por entre los cuales pasamos. Y Jehová arrojó de delante de nosotros a todos los pueblos, y al amorreo que habitaba en la tierra; nosotros, pues, también serviremos a Jehová, porque él es nuestro Dios.”
a. Porque Jehová nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto: Considerablemente, su declaración se basa en vivencias pasadas de Dios con ellos. ¿Cómo no podrían servir a tan grande Dios?
b. También serviremos a Jehová, porque él es nuestro Dios: Este es esencialmente la misma actitud reflejada por los discípulos de Jesús en Juan 6:66-69: ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Si servir a Dios a veces parece difícil, piensa en las alternativas.
Entonces Josué dijo al pueblo: “No podréis servir a Jehová, porque él es Dios santo, y Dios celoso; no sufrirá vuestras rebeliones y vuestros pecados. Si dejareis a Jehová y sirviereis a dioses ajenos, él se volverá y os hará mal, y os consumirá, después que os ha hecho bien.” El pueblo entonces dijo a Josué: “No, sino que a Jehová serviremos.”
a. No podréis servir a Jehová, porque él es Dios santo: Josué no está tratando de desanimar la fe de ellos, pero intenta desanimar un compromiso a la ligera de seguir al Señor. Ellos necesitan recordar que están sirviendo a Dios bajo un pacto que prometeque serán maldecidos por desobediencia.
i. Jesús expresó el mismo tipo de advertencia que seguirle necesitaba compromiso total en Lucas 14:25-33. NO es que Jesús no quiera seguidores, pero Él no quiere compromisos rotos fácilmente y hechos a la ligera.
b. ¡No, sino que a Jehová serviremos! Esta era la respuesta que Josué quería: un compromiso, pero hecho con un entendimiento completo de las consecuencias.
Y Josué respondió al pueblo: “Vosotros sois testigos contra vosotros mismos, de que habéis elegido a Jehová para servirle.” Y ellos respondieron: “Testigos somos.” “Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová Dios de Israel.” Y el pueblo respondió a Josué: “A Jehová nuestro Dios serviremos, y a su voz obedeceremos.” Entonces Josué hizo pacto con el pueblo el mismo día, y les dio estatutos y leyes en Siquem. Y escribió Josué estas palabras en el libro de la ley de Dios; y tomando una gran piedra, la levantó allí debajo de la encina que estaba junto al santuario de Jehová. Y dijo Josué a todo el pueblo: “He aquí esta piedra nos servirá de testigo, porque ella ha oído todas las palabras que Jehová nos ha hablado; será, pues, testigo contra vosotros, para que no mintáis contra vuestro Dios.” Y envió Josué al pueblo, cada uno a su posesión.
a. Vosotros sois testigos… esta piedra nos servirá de testigo: Josué necesitaba que el pacto fuera confirmado por el testimonio de 2 testigos, el pueblo y la piedra. Por tanto, se trataba de un pacto de unión delante de Dios (Deuteronomio 19:15).
b. No debemos quedarnos cortos en nuestra propia necesidad de volver a establecer nuestro pacto con el Señor. La re dedicación a Dios puede ser una cosa asombrosa y poderosa.
Después de estas cosas murió Josué hijo de Nun, siervo de Jehová, siendo de ciento diez años. Y le sepultaron en su heredad en Timnat-sera, que está en el monte de Efraín, al norte del monte de Gaas. Y sirvió Israel a Jehová todo el tiempo de Josué, y todo el tiempo de los ancianos que sobrevivieron a Josué y que sabían todas las obras que Jehová había hecho por Israel.
a. Siendo de ciento diez años: Josué muere a una edad muy avanzada, y es enterrado en la tierra de su herencia.
b. Y sirvió Israel a Jehová todo el tiempo de Josué: Esto fue el más grande legado de Josué. Su influencia piadosa fue efectivamente comunicada a y a través de la nación.
Y enterraron en Siquem los huesos de José, que los hijos de Israel habían traído de Egipto, en la parte del campo que Jacob compró de los hijos de Hamor padre de Siquem, por cien piezas de dinero; y fue posesión de los hijos de José.
a. Los huesos de José: Este puede parecer un punto intrascendente, pero cumple Génesis 50:25. A Dios le gusta atar cabos sueltos. Esto también se menciona en Hebreos 11:22 como un ejemplo de la fe de José.
También murió Eleazar hijo de Aarón, y lo enterraron en el collado de Finees su hijo, que le fue dado en el monte de Efraín.
a. También murió Eleazar hijo de Aarón: La muerte de Eleazar significó que otro vínculo con la generación del desierto pasó. Ahora Finees era el Sumo Sacerdote.
b. Mientras pasan las generaciones cada una es retada a conquistar la tierra de bendición y promesa que Dios tiene para ellos – y lo harán, mientras presten mucha atención a nuestro Josué, a Jesucristo.
© 2001 David Guzik – No se permite la distribución más allá del uso personal sin autorización.
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