David Guzik :: Zacarías 7 – Obediencia es Mejor que el Ritual

Zacarías 7 – Obediencia es Mejor que el Ritual

A. Confrontando el pecado de la hipocresía religiosa.

1. (Zacarías 7:1-3) Una pregunta en cuanto al ayuno.

Aconteció que en el año cuarto del rey Darío vino palabra de Jehová a Zacarías, a los cuatro días del mes noveno, que es Quisleu, cuando el pueblo de Bet-el había enviado a Sarezer, con Regem-melec y sus hombres, a implorar el favor de Jehová, y a hablar a los sacerdotes que estaban en la casa de Jehová de los ejércitos, y a los profetas, diciendo: ¿Lloraremos en el mes quinto? ¿Haremos abstinencia como hemos hecho ya algunos años?

a. En el cuarto año…a los cuatro días del mes noveno: En Diciembre 4, 518 a.C. una delegación llego a Jerusalén sobre una pregunta en cuanto al ayuno. En este punto, el templo estaba a medio camino para ser completado.

b. ¿Lloraremos en el mes quinto? ¿Haremos abstinencia? El ayuno en el mes quinto recordaba la destrucción del templo (2 Reyes 25:8-9). Zacarías también menciona un ayuno en el mes séptimo (Zacarías 7:5), el cual recordaba el asesinato de Gedalías, el último acto de rebelión en contra del gobernador Babilonio en Judá (2 Reyes 25:25).

i. La Ley de Moisés solamente ordenaba un día de ayuno, en el Día de Expiación (Levíticos 16:29-34). Además de este día, durante el exilio, el pueblo Judío instituyó cuatro ayunos más para recordar fechas claves de la derrota trágica de su nación. Aquí están los ayunos adicionales:

ii. El Salmo 137 de una manera hermosa – y poderosa – describe la tristeza de corazón que hizo que los exiliados recordaran su pecado y la tragedia con estos días adicionales de ayuno.

c. A hablar a los sacerdotes que estaban en la casa de Jehová: Estos hombres sabían que durante su exilio forzado en Babilonia, ellos observaban estos ayunos que recordaban la caída trágica de Jerusalén. Ahora, ya que el pueblo de Dios estaba de regreso en la tierra, y el templo estaba reconstruido, ellos querían saber si era apropiado el continuar con estos ayunos con recordatorio de lamento.

i. Este asunto trae un tema relevante el día de hoy: ¿Por cuánto tiempo debiéramos de recordar y llorar sobre nuestro pecado? ¿Debemos de hacer cosas para recordar ya sea nuestro pecado o las tragedias del pasado?

d. Como hemos hecho ya algunos años: Estos ayunos adicionales no fueron ordenados por Dios, sino que fueron instituidos por el hombre. Pero, debido a que eran una práctica tradicional por mucho tiempo (al menos 70 años), ellos desarrollaron una autoridad por si mismos. “Hemos hecho esto ya algunos años, muy bien podríamos seguir haciéndolo.”

2. (Zacarías 7:4-7) Hipocresía sobre el ayuno es reprendido.

Vino, pues, a mí palabra de Jehová de los ejércitos, diciendo: Habla a todo el pueblo del país, y a los sacerdotes, diciendo: Cuando ayunasteis y llorasteis en el quinto y en el séptimo mes estos setenta años, ¿habéis ayunado para mí? Y cuando coméis y bebéis, ¿no coméis y bebéis para vosotros mismos? ¿No son estas las palabras que proclamó Jehová por medio de los profetas primeros, cuando Jerusalén estaba habitada y tranquila, y sus ciudades en sus alrededores y el Neguev y la Sefela estaban también habitados?

a. ¿Habéis ayunado para mí? La palabra de Dios a través de Zacarías reprendió al pueblo de Dios por lo que su ayuno se había convertido – fiestas de lástima indulgentes, en lugar de un tiempo genuino para buscar a Dios. Sus vidas no estaban bien cuando comían y bebían – pues lo hacían para ellos mismos, no para Jehová. Unos pocos días de ayuno cada año no podrían enmendar en que el resto del año vivamos para vosotros mismos.

i. Esto también nos muestra que cuando nos aferramos a la memoria del pecado o la tragedia del pasado, a menudo lo hacemos por una simple auto indulgencia. Lo hacemos por nosotros mismos, no para el Señor.

b. ¿No son estas las palabras que proclamó Jehová? Debido a que sus corazones no estaban bien con Dios, sus rituales no estaban bien delante de Dios. Una obediencia de todos los días podría hacer que sus ayunos fueran significativos, pero ellos descuidaban la obediencia de todos los días, lo que hacía que sus ayunos fueran hipócritas.

i. “Era fácil el pasar cinco días llorando sus pérdidas, pero era más difícil el enfrentar los mandamientos continuos de Dios.” (Baldwin)

ii. En lugar de recordar activamente el pecado o la tragedia del pasado, Dios quiere que nos enfoquemos en una obediencia activa, y en un caminar activo con Él. “No hay necesidad para observar los tristes aniversarios de nuestros pecados y su castigo que le acompaña, si ya tenemos la seguridad del perdón gratuito de Dios. Cuando Él perdona y restaura, la necesidad para morar en el pasado amargo ha terminado…Muchos de nosotros siempre estamos morando al lado de las tumbas de nuestro pasado muerto.” (Meyer)

iii. Por medio de los profetas primeros, cuando Jerusalén estaba habitada y tranquila, y sus ciudades en sus alrededores: Si sus antepasados hubieran sido obedientes, ellos jamás hubieran tenido que ayunar, y su tierra no hubiera sido conquistada ni estuviera desolada.

c. El Neguev y la Sefela estaban también habitados: Aquí, el Neguev se refiere al Sur, el desierto desolado cerca del Mar Muerto. Esta área no siempre estuvo desolada; antes de la desobediencia de Israel, también era prospera y estaba habitada.

B. Lo que Dios quiere: personas que escuchen y obedezcan.

1. (Zacarías 7:8-10) La conducta que Dios desea.

Y vino palabra de Jehová a Zacarías, diciendo: Así habló Jehová de los ejércitos, diciendo: Juzgad conforme a la verdad, y haced misericordia y piedad cada cual con su hermano; no oprimáis a la viuda, al huérfano, al extranjero ni al pobre; ni ninguno piense mal en su corazón contra su hermano.

a. Juzgad conforme a la verdad, y haced misericordia y piedad: En Zacarías 7:7 el profeta reprendió al pueblo de Dios y a sus antepasados por un descuido básico de la obediencia. Ahora Zacarías describe el tipo de obediencia que Dios quería, comenzando con el trato decente y amoroso hacia tu prójimo.

b. Ni ninguno piense mal en su corazón contra su hermano: Algunos de entre el pueblo de Dios hallan que es más fácil el ayunar por unos pocos días al año en lugar de tratar verdaderamente a los demás de una manera piadosa. Su mala relación con los demás ha demostrado una mala relación fundamental con el Señor.

2. (Zacarías 7:11-12) La reacción rebelde del pueblo de Dios.

Pero no quisieron escuchar, antes volvieron la espalda, y taparon sus oídos para no oír; y pusieron su corazón como diamante, para no oír la ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su Espíritu, por medio de los profetas primeros; vino, por tanto, gran enojo de parte de Jehová de los ejércitos.

a. Pero no quisieron escuchar, antes volvieron la espalda, y taparon sus oídos…pusieron su corazón como diamante: Zacarías de una manera vívida describe la progresión del rechazo. Comienza con no escuchar a Dios, luego una auto justificación al volverla espalda, luego detuvieron su corazón. Todo termina con corazones duros como el diamante.

i. Cuando te encuentras con personas con un corazón como diamante, sabes que no se hicieron así de la noche a la mañana. Hubo una progresión gradual hacia su estado presente de dureza.

ii. Baldwin en volvieron la espalda: “Israel dio la espalda, como un animal que endurece cada músculo en su esfuerzo para rechazar el yugo.”

b. Para no oír la ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su Espíritu, por medio de los profetas primeros: En su estado de dureza, ellos simplemente no querían escuchar la palabra de Dios. Cuando perdemos nuestra hambre por la palabra de Dios, es una evidencia sobria de la progresión de rechazo y dureza de corazón.

i. Zacarías no dudo en que el Espíritu de Dios genuinamente inspiraba sus palabras y las palabras de otros profetas.

3. (Zacarías 7:13-14) El juicio de Dios sobre la desobediencia.

Y aconteció que así como él clamó, y no escucharon, también ellos clamaron, y yo no escuché, dice Jehová de los ejércitos; sino que los esparcí con torbellino por todas las naciones que ellos no conocían, y la tierra fue desolada tras ellos, sin quedar quien fuese ni viniese; pues convirtieron en desierto la tierra deseable.

a. Así como él clamó, y no escucharon, también ellos clamaron, y yo no escuché: Ya que el pueblo de Dios se rehusó a escuchar a Dios, Dios se rehusaría a escuchar y contestar sus oraciones. Esto es otra buena razón para estar bajo la enseñanza de la palabra de Dios – para que así nuestras oraciones sean contestadas.

b. Los esparcí con torbellino: “Esto se refiere a las victorias rápidas y a la conducta cruel de los Caldeos hacia los Judíos; ellos vinieron a éstos como un torbellino; fueron arrojados aquí y allá, arriba y abajo, por todas partes esparcidos y confundidos.” (Clarke)

c. La tierra fue desolada tras ellos: Su desobediencia e indiferencia hacia Dios les condujo a ser esparcidos y desolados. Esto siempre es nuestro destino cuando permitimos que los rituales religiosos tomen el lugar de una verdadera relación y obediencia diaria hacia Dios.

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