David Guzik :: Éxodo 17 – La Provisión y Protección de Dios para Israel

Éxodo 17 – La Provisión y Protección de Dios para Israel

A. Agua de la roca

1. (Éxodo 17:1-4) La congregación de Israel alterca con Moisés.

Toda la congregación de los hijos de Israel partió del desierto de Sin por sus jornadas, conforme al mandamiento de Jehová, y acamparon en Refidim; y no había agua para que el pueblo bebiese. Y altercó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua para que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercáis conmigo? ¿Por qué tentáis a Jehová? Así que el pueblo tuvo allí sed, y murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados? Entonces clamó Moisés a Jehová, diciendo: ¿Qué haré con este pueblo? De aquí a un poco me apedrearán.

a. Conforme al mandamiento de Jehová… y no había agua para que el pueblo bebiese: Israel hizo exactamente lo que Dios mandó, siguiendo la columna de nube y de fuego; pero no había agua para beber. Estaban en la voluntad de Dios pero en un tiempo difícil. Es posible estar completamente dentro de la voluntad de Dios y aún estar en la temporada de grandes problemas.

i. “La sed es el apetito más vehemente, así que ellos muestran más ansiedad y seriedad por el agua que por el pan.” (Trapp)

ii. Cole en matarnos de sed….y a nuestros ganados: “¿Quién sino un ganadero estaría preocupado por su ganado que moría de sed siendo que él mismo se estuviera muriendo de sed? Aquí hablan los verdaderos granjeros Israelitas.”

iii. Partió… por sus jornada: “En Números 33:12-14 se dice que cuando los Israelitas partieron de Sin ellos acamparon en Dofca, y después en Alús, y después ellos llegaron a Refidim. Por lo tanto, aquí se omiten dos estaciones, probablemente porque no hubieron momentos relevantes en ninguno de esos lugares.” (Clarke)

b. Y altercó el pueblo con Moisés: El pueblo de Israel tenía un problema real – no había agua para que el pueblo bebiese. Este no era un problema imaginario y el pueblo tenía razón en estar preocupado. Pero cuando el pueblo altercó con Moisés, ellos no respondieron con una acción o pensamiento espiritual.

c. ¿Por qué tentáis a Jehová? El pueblo enfocó su queja contra Moisés, pero Moisés entendió que su problema era con Jehová.

i. Cuando tenemos un problema es mucho más fácil el culpar a alguien que el pensar el problema cuidadosamente y en el espíritu. En esta situación Israel pudo pensar, “Estamos en un desierto; no es de sorprenderse que no haya mucha agua aquí. Necesitamos buscar a Dios para satisfacer esta necesidad.” Pero en lugar de eso ellos culparon a Moisés y no hicieron nada para ayudar con el problema.

d. Entonces clamó Moisés a Jehová: La falta de agua no era culpa de Moisés. Pero como el líder de Israel él les debía de conducir a la respuesta – y el clamar a Jehová era la manera correcta de llevarles a la solución.

i. Moisés sabía que el pueblo era injusto con él (¿Qué haré con este pueblo? De aquí a un poco me apedrearán). Pero él aún debía de dirigirlos a pesar de la presión de un ataque injustificado, y él hizo bien al voltear a Dios en oración.

ii. “Una de las características y rasgos dignos de alabar de Moisés era de que él llevaba las dificultades al Señor.” (Kaiser)

2. (Éxodo 17:5-6) Dios le dice a Moisés como será proveída el agua

Y Jehová dijo a Moisés: Pasa delante del pueblo, y toma contigo de los ancianos de Israel; y toma también en tu mano tu vara con que golpeaste el río, y ve. He aquí que yo estaré delante de ti allí sobre la peña en Horeb; y golpearás la peña, y saldrán de ella aguas, y beberá el pueblo. Y Moisés lo hizo así en presencia de los ancianos de Israel.

a. Toma también en tu mano tu vara con que golpeaste el río: Dios dirigió a Moisés a pasar delante del pueblo, y el traer a otros ancianos con él (toma contigo de los ancianos de Israel), y el usar lo que Dios había usado antes. Esto le dio seguridad a Moisés debido a que él vio a Dios usar antes la misma vara para hacer grandes milagros.

i. Moisés no levantaría esa vara sin recordar el poder de Dios. La confianza que él recibió al recoger la vara fue la confianza en Dios, y no en él mismo.

b. He aquí que yo estaré delante de ti allí: Uno de los grandes temas de este viaje de Egipto a Canaán era que Dios estaba con ellos. Él estaba con ellos en cada paso del camino y aquí, otra vez, Él mostraría Su presencia a Moisés y a Israel.

i. “Si Dios no hubiera estado parado sobre la peña, en vano Moisés la hubiera golpeado. Los medios deben de usarse, pero solo se debe de depender de Dios para el éxito.” (Trapp)

c. Y golpearás la peña, y saldrán de ella aguas: Moisés fue ordenado, en la presencia de Jehová, de golpear la peña con su vara, y agua saldría para satisfacer la sed del pueblo de Dios.

i. Este era un milagro extraordinario. Moisés (y todos los demás) sabían que el agua normalmente no sale de las rocas de esa manera.

ii. Este era un milagro generoso. “Aquí de nuevo la divina paciencia aparece, pues Jehová no pronunció ninguna palabra de reproche, pero a pesar de la incredulidad impaciente del pueblo proveyó agua de la peña para ellos.” (Morgan)

iii. Este era un milagro con propósito. Al golpear la peña Moisés actuó el drama que quizás él no entendió. En 1 de Corintios 10:4, Pablo escribió de Israel en el Éxodo: y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo. No sabemos si esta peña siguió a Israel de la manera que Pablo lo describe, pero si sabemos que cuando Jesús fue golpeado agua viva fluyó para que todos la recibieran.. “He aquí un tipo de Cristo, ‘golpeado, herido de Dios, y afligido’ (Isaías 53:4; 1 Corintios 10:4).” (Trapp)

iv. Jesús fue golpeado con la vara de Moisés – la maldición de la ley – y a través de Él fluyó agua para satisfacer nuestra sed espiritual. Como el viejo himno dice:

Deja que el agua y la sangre

La cual fluye de Tú costado

Sea del pecado una doble cura,

Sálvame de su ira y poder

3. (Éxodo 17:7) Moisés nombra el lugar a modo de reprensión a los hijos de Israel.

Y llamó el nombre de aquel lugar Masah y Meriba, por la rencilla de los hijos de Israel, y porque tentaron a Jehová, diciendo: ¿Está, pues, Jehová entre nosotros, o no?

a. Y llamó el nombre de aquel lugar: Moisés hizo lo que Dios le dijo que hiciera y el agua salió de la peña. Este era un gran milagro de la provisión de Dios y fue una reprensión para el incrédulo y rebelde Israel.

i. No sabemos exactamente como Dios proveyó agua de la peña. Quizás había un pozo artesiano la cual Dios causó que se abriera cuando Moisés golpeó la peña. Quizás fue un milagro singular.

b. Y llamó el nombre de aquel lugar Masah y Meriba: Dios recordó la manera en que Israel le tentó en Masah y Meriba, la cual la vemos en distintos pasajes.

· Deuteronomio 6:16: No tentaréis a Jehová vuestro Dios, como lo tentasteis en Masah

· Deuteronomio 9:22: en Masah … provocasteis a ira a Jehová.

· Deuteronomio 33:8: A Leví dijo: Tu Tumim y tu Urim sean para tu varón piadoso, A quien probaste en Masah, Con quien contendiste en las aguas de Meriba

c. tentaron a Jehová, diciendo: ¿Está, pues, Jehová entre nosotros, o no? Dios dijo dramáticamente, Yo estaré delante de ti sobre la peña de Horeb (Éxodo 17:6), diciendo que Él estaba y estaría presente con Israel. Pero aún ellos se preguntaron, ¿Está, pues, Jehová entre nosotros, o no?

i. Esta actitud entre los Israelitas era su gran pecado. En este tiempo de dificultad los hijos de Israel – directamente o indirectamente – dudaron del cuidado y de la amorosa presencia de Dios entre ellos. “Bajo la ansiedad de una escasez inmediata, este pueblo dudo del único hecho del cual ellos tenían evidencia abrumadora.” (Morgan)

ii. Después, cuando Israel recordó la provisión de Dios en el desierto en la Fiesta de los Tabernáculos, ellos tuvieron una específica ceremonia donde ellos recordaron este milagro del agua de la peña. En ese exacto contexto, Jesús dijo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva. (Juan 7:37-38)

iii. El agua viva de la cual Jesús habló era el Espíritu Santo (Juan 7:39); no es un milagro menor que Dios traiga el amor y poder del Espíritu Santo de nuestros corazones que lo es el sacar agua de la roca – nuestros corazones pueden ser igual de duros.

B. Dios le da la victoria a Israel sobre los Amalecitas.

1. (Éxodo 17:8-9) Amalec ataca a Israel

Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim. Y dijo Moisés a Josué: Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del collado, y la vara de Dios en mi mano.

a. Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim: Este ataque de los Amalecitas no fue provocado por Israel. En respuesta a esto Moisés llamó a Josué a que dirigiera los ejércitos de Israel en la batalla, para defender a la nación en contra del ataque de Amalec.

i. “Amalec era el nieto de Esaú (Génesis 36:12), y aunque era semejante a Israel, probó ser un empedernido enemigo, como lo muestra la historia posterior.” (Thomas)

ii. “Existe cualquier posibilidad de que ellos supieran acerca de la promesa de la Tierra de Canaán la cual había sido dada al hermano gemelo de Esaú, Jacob; por lo tanto, ellos no debieron de sentir ninguna amenaza en el Neguev si hubieran recordado y tomado en serio esta promesa.” (Kaiser)

iii. “Como cualquier otro nómada, ellos se extendían sobre una área muy amplia, el cual se describía aproximadamente como ‘el Neguev’ o ‘la tierra del sur’ (Números 13:29)”. (Cole)

b. Y peleó contra Israel: El método de ataque utilizado por Amalec era despiadado. Deuteronomio 25:17-18 dice: Acuérdate de lo que hizo Amalec contigo en el camino, cuando salías de Egipto; de cómo te salió al encuentro en el camino, y te desbarató la retaguardia de todos los débiles que iban detrás de ti, cuando tú estabas cansado y trabajado; y no tuvo ningún temor de Dios.

i. “De la manera más traicionera y ruin; puesto que ellos llegaron por la retaguardia del campamento … Sin duda el equipaje era el objetivo de su avaricia; pero al encontrar a las mujeres, niños, ancianos y personas enfermas junto con el equipaje, ellos los hirieron y se llevaron los despojos.” (Clarke)

c. Sal a pelear contra Amalec: Esta era la primera experiencia significativa de guerra para el antiguo Israel. Ellos habían vivido por cientos de años como esclavos, y Dios peleó a los Egipcios en lugar de ellos. Ahora ellos debían de aprender a confiar en Dios mientras peleaban una batalla.

i. “En su primer movimiento Dios los dirigió de tal manera para evitar cualquier posibilidad de guerra (Éxodo 13:17). Ahora ellos estaban envueltos en la guerra.” (Morgan)

d. La vara de Dios en mi mano: Las Escrituras llaman a este grueso bastón la vara de Moisés (tu vara, Éxodo 17:5) y la vara de Dios. Estaba esta combinación del instrumento humano y del poder divino.

i. Dios le llamaba la vara de Moisés, y así honraba a Moisés. Moisés le llamaba la vara de Dios, y así honraba a Dios.

2. (Éxodo 17:10-11) Israel prevalece en la batalla mientras Moisés ora.

E hizo Josué como le dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a la cumbre del collado. Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía; mas cuando él bajaba su mano, prevalecía Amalec.

a. E hizo Josué como le dijo Moisés: Este es el primer pasaje que menciona a Josué. Lo encontramos haciendo lo que él hacía hasta el tiempo que Moisés salió de la escena – Josué servía al Señor y a Moisés fielmente.

i. Es bueno el recordar que el nombre de Jesús es simplemente la manera de pronunciación Griega del nombre de Josué. Es el mismo nombre

ii. “En la Septuaginta y en el Testamento Griego él es llamado Jesús: el nombre significa Salvador, y a él se le permite ser un tipo expresivo de nuestro bendito Salvador. Él peleó y conquistó a los enemigos de su pueblo, los trajo a la tierra prometida, y los dividió por lote. El paralelismo entre él y el Salvador del muno es muy evidente que no requiere el señalarlo como tal.” (Clarke)

b. Moisés y Aarón y Hur subieron a la cumbre del collado: Ellos hicieron esto para poder ver, y para poder ser vistos, y para que ellos pudieran orar. Aarón era el hermano de Moisés, y algunos piensan que Hur era su cuñado.

i. “Josefo (Antigüedades III, 54 [ii.4]) preserva una costumbre Judía de que Hur era el esposo de María, la hermana de Moisés.” (Kaiser)

c. Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía: Moisés apoyó en la batalla detrás de la escena, ocupado en oración. El destino de Israel en la batalla dependía de la intercesión de Moisés debido a que cuando él oraba Israel prevalecía y cuando él paraba de orar prevalecía Amalec.

i. Alzaba Moisés su mano: Esta frase describe la postura de oración de un Israelita, aún hoy personas inclinan su cabeza o juntan sus manos para orar. Moisés debía de orar, y debía mantenerse en oración. “Los verbos de ‘alzar’ y ‘bajar’ son introducidos como verbos en el tiempo perfecto … Acción continua o frecuente se denota aquí claramente.” (Kaiser)

ii. Este asombroso pasaje nos muestra que la vida o muerte de Israel dependían de las oraciones de un hombre. Moisés oraba de la manera que nosotros debemos de orar – con pasión, creyendo que la vida y la muerte – y quizás la eternidad – dependían de la oración.

iii. Es difícil el reconciliar esto sabiendo que Dios tenía un plan preconcebido. Pero Dios no quería que Moisés estuviera preocupado por ello – él debía de orar como si en realidad importara. Sólo porque no podemos imaginar como la oración se engrana con el plan preconcebido de Dios no significa que debemos de detenernos de creer que la oración importa.

iv. En su vida temprana Moisés pensaba que la única manera de ganar una batalla era peleando (Éxodo 2:11-15). Ahora Moisés dejó que Josué peleara mientras él hacía el trabajo más importante: orar por la victoria.

3. (Éxodo 17:12-13) La manos de Moisés son fortalecidas en la oración.

Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol. Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.

a. Y las manos de Moisés se cansaban: El trabajo de dar apoyo en la batalla con la oración era difícil y Moisés no podía continuar fácilmente. Podríamos pensar que la pelea era el arduo trabajo y que la oración era el trabajo fácil, pero la oración también era trabajo difícil.

i. La oración en ocasiones es fácil y llevadera; en otras ocasiones es arduo trabajo. He aquí el porque Pablo describió el ministerio de Epafras como siempre rogando encarecidamente por vosotros en sus oraciones (Colosenses 4:12), y el porque Pablo escribió que nosotros debemos perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias (Colossians 4:2).

b. Aarón y Hur sostenían sus manos: Aarón y Hur vinieron junto con Moisés y literalmente sostuvieron sus manos levantadas durante la oración. Ellos le ayudaron y participaron con él en la intercesión. Su ayuda fue exitosa: así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol.

i. Aún cuando este era el trabajo de Moisés, era más de lo que él podía hacer. Moisés solo no podía ganar esta batalla de oración. Él necesitaba de otros que estuvieran a su lado para fortalecerle en la oración.

ii. “Algunos de los padres consideran a Moisés, con sus manos levantadas, como una figura de Cristo en la cruz, sufriendo por la humanidad, y llevándose la completa victoria sobre el pecado y Satanás.” (Clarke)

c. Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada: Debido a la obra de la oración, Israel obtuvo la victoria sobre Amalec. No se nos da más opción que el decir que si Moisés, Aarón y Hur no hicieran la obra de la oración, Israel hubiera sido derrotado, y la historia hubiera cambiado.

i. Este asombroso pasaje nos muestra que tan importante es la oración. Vida o muerte – el curso de la misma historia – depende de la oración. Podemos concluir que muchas veces el pueblo de Dios es derrotado hoy debido a que no oran, o debido a que la oración no apoya su obra.

ii. Sin embargo, Josué debía de pelar. La oración de Moisés no quitaba lo que Josué debía de hacer. La batallase ganó con oración, pero también a través de instrumentos normales – el trabajo del ejército, dirigidos por Josué. “La oración es una completa burla si no nos lleva al uso práctico de los medios los cuales alcanzarán los fines por los cuales oramos.” (Spurgeon)

4. (Éxodo 17:14-16) Una batalla sin fin con Amalec

Y Jehová dijo a Moisés: Escribe esto para memoria en un libro, y di a Josué que raeré del todo la memoria de Amalec de debajo del cielo. Y Moisés edificó un altar, y llamó su nombre Jehová-nisi; y dijo: Por cuanto la mano de Amalec se levantó contra el trono de Jehová, Jehová tendrá guerra con Amalec de generación en generación.

a. Escribe esto para memoria en un libro: Kaiser observa de que hay cinco lugares en el Pentateuco donde Moisés escribió algo cuando Dios se lo ordenó (Éxodo 17:14; Éxodo 24:4-7; Éxodo 34:27; Números 33:1-2 y Deuteronomio 31:9, 24). No hace mucho tiempo algunos académicos se mostraron escépticos al decir que la escritura aún no se inventaba en los días de Moisés. Pero investigaciones más profundas han probado que el hombre ha escrito por lo menos 1,500 años antes del tiempo de Moisés.

b. Raeré del todo la memoria de Amalec de debajo del cielo: Amalec obtuvo una culpa y vergüenza sobresaliente al fin del ataque contra Israel.

· Amalec tuvo la vergüenza de ser la primer nación en hacer guerra contra Israel.

· Amalec tuvo la vergüenza de salir de su camino para atacar a Israel.

· Amalec tuvo la vergüenza de pelar contra Dios.

c. Y Moisés edificó un altar, y llamó su nombre Jehová-nisi: A pesar de que Moisés sabía de que su oración era importante, él no fue lo suficientemente necio para pensar que él ganó la batalla. Como un acto de adoración él edificó un altar y adoró el nombre de Jehová-nisi (Jehová es mi estandarte).

i. Nisi describe una bandera o estandarte. La idea es que Dios es victorioso en la batalla y el estandarte de la victoria se alzaba en alto. La misma palabra se usa para la serpiente en el palo en Números 21:8, y en otro pasaje significativo:

· Salmo 60:4: Has dado a los que te temen bandera Que alcen por causa de la verdad.

· Isaías 11:10: Acontecerá en aquel tiempo que la raíz de Isaí, la cual estará puesta por pendón a los pueblos, será buscada por las gentes; y su habitación será gloriosa..

ii. En Éxodo 17 vemos los ejemplos del poder de Dios y del esfuerzo humano trabajando juntos. Moisés golpeó la roca; pero sólo Dios pudo sacar agua. Josué peleó, Moisés oró, pero sólo Dios dio la victoria sobre Amalec. Y en todo Dios recibió la gloria. No era que Israel es mi estandarte o Moisés es mi estandarte o Josué es mi estandarte, pero si era Jehová-nisi: Jehová es mi estandarte.

iii. Algunas veces nosotros estamos más alerta del poder y la ayuda de Dios cuando trabajamos juntos con Él que cuando Dios hace el trabajo por Si mismo. Jehová-nisi llegó después de la batalla con Amalec, no después de los Egipcios muertos en el Mar Rojo.

d. Por cuanto la mano de Amalec se levantó contra el trono de Jehová, Jehová tendrá guerra con Amalec de generación en generación: Esta no fue la última batalla o mención de la Amalecitas. Dios continuó Su guerra en contra de ellos, pero les dio mucho tiempo para arrepentirse de este gran pecado de atacar a su primo, Israel.

· Balaam profetizó su ruina (Números 24:20)

· Cientos de años después, Saúl peleó en contra de ellos. (1 Samuel 14:48)

· Dios luego ordenó a Saúl el continuar su pelea en contra de Amalec, para traer juicio completo sobre ellos por su antiguo pecado en contra de Israel (1 Samuel 15:1-7)

· En obediencia parcial hacia Dios, Saúl peleó en contra de los Amalecitas y los derrotó, pero mantuvo a su rey vivo (y presuntamente a otros) mientras se enriquecía a si mismo durante la batalla (1 Samuel 15:7-9)

· El error de obedecer a Dios en cuanto a Amalec fue el primer acto de desobediencia que le costó a Saúl el trono (1 Samuel 15:2-9 y 1 Samuel 28:18)

· Los Amalecitas existieron después de esto, así que sabemos que Saúl no completó el trabajo que Dios le dio (1 Samuel 27:8, 30:17; 2 Samuel 8:12)

· Hay algunos indicadores de que este trabajo se completó en los días posteriores de la monarquía dividida bajo Ezequías (1 Crónicas 4:41-43), pero es posible que algunos descendientes de los Amalecitas hayan permanecido (como Amán en Ester 3:1)

i. Debido al fuerte mandato de Dios de pelear contra Amalec hasta que fueran completamente conquistados, muchos ven a Amalec como una imagen de nuestra carne, el aspecto no espiritual del hombre la cual hace guerra en contra del espíritu. En este sentido, “Amalec” constantemente pelea en contra del espíritu y se debe luchar contra éste hasta que haya sido completamente conquistado (Gálatas 5:17).

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