David Guzik :: 2 Samuel 15 – La Rebelión de Absalón

2 de Samuel 15 – La Rebelión de Absalón

A. La engañosa toma de poder de Absalón.

1. (2 de Samuel 15:1-6) Absalón roba los corazones de los hombres de Israel.

Aconteció después de esto, que Absalón se hizo de carros y caballos, y cincuenta hombres que corriesen delante de él. Y se levantaba Absalón de mañana, y se ponía a un lado del camino junto a la puerta; y a cualquiera que tenía pleito y venía al rey a juicio, Absalón le llamaba y le decía: ¿De qué ciudad eres? Y él respondía: Tu siervo es de una de las tribus de Israel. Entonces Absalón le decía: Mira, tus palabras son buenas y justas; mas no tienes quien te oiga de parte del rey. Y decía Absalón: ¡Quién me pusiera por juez en la tierra, para que viniesen a mí todos los que tienen pleito o negocio, que yo les haría justicia! Y acontecía que cuando alguno se acercaba para inclinarse a él, él extendía la mano y lo tomaba, y lo besaba. De esta manera hacía con todos los israelitas que venían al rey a juicio; y así robaba Absalón el corazón de los de Israel.

a. Carros y caballos, y cincuenta hombres que corriesen delante de él: Esto significa que Absalón no quería los carros por la velocidad, sino para hacer una procesión impresionante. Este era Absalón el político, percibiendo lo que la gente quería y sabiendo cómo darles la imagen de ello.

i. Samuel – quien ungió al padre de Absalón – nunca anduvo por ahí con caballos, carros ni un séquito. Samuel viajaba a pie – y como hombre, Absalón ni siquiera era digno de ser mencionado en el mismo aliento que Samuel.

b. A cualquiera que tenía pleito y venía al rey a juicio: Los antiguos reyes eran más que la cabeza del gobierno, eran también la “corte suprema” de su reino. Si alguien creía que su corte local no les hacia justicia, apelaban entonces a la corte del rey, donde el rey o un representante del rey escuchaban su caso.

c. Mira, tus palabras son buenas y justas; mas no tienes quien te oiga de parte del rey: Absalón provocó descontento contra el gobierno de David e hizo campaña contra él al prometer dar la justicia que David (supuestamente) le negaba a su pueblo.

d. ¡Quién me pusiera por juez en la tierra... yo les haría justicia!: Absalón tenía razones para sentirse desilusionado de la administración de justicia de David. Cuando Amnón violó a Tamar, David no hizo nada. Cuando Absalón hizo algo al respecto, David lo exilió e incluso lo mantuvo a distancia cuando regresó.

e. Y acontecía que cuando alguno se acercaba para inclinarse a él, él extendía la mano y lo tomaba, y lo besaba: Absalón era hábil para proyectar una imagen de “hombre del pueblo”. Evidentemente alardeando, no dejaba a otros que se inclinaran ante él sino que los levantaba, tomaba sus manos y los recibía con los brazos abiertos.

i. De lo que sabemos de Absalón, podemos adivinar que él realmente no se consideraba a sí mismo como un “hombre del pueblo” en absoluto. El regularmente actuaba como si estuviera por encima de los demás y como si las leyes que aplicaban sobre otros no aplicaran a él. Él sabía que era más atractivo, mejor conectado, estaba en mejores circunstancias, y tenía mejores instintos políticos que la mayoría. Pero estos instintos políticos le hicieron saber a Absalón que tenía que crear la imagen de un hombre de pueblo.

ii. En el antiguo Israel las personas eran fácilmente impresionadas por la imagen y demasiado lentas para ver o apreciar la realidad detrás de la imagen. Desde los días del antiguo Israel, solo nos hemos vuelto más impresionables por la imagen que por la realidad.

iii. “Absalón parecía ser el verdadero y era el indisputable heredero al trono; David no podría, en el curso de la naturaleza, vivir mucho tiempo, y la mayoría de las personas están más dispuestas a aclamar a la luz de los que se levantan, que a regocijarse en quienes se pone el sol.” (Clarke)

f. Y así robaba Absalón el corazón de los de Israel: El astuto plan de campaña de Absalón funcionó. Se volvió más popular y más confiado que David.

i. Absalón sabía exactamente cómo hacer esto

· Cuidadosamente cultivó una imagen emocionante y seductora (carros y caballos, y cincuenta hombres que corriesen delante de él).

· Trabajó duro (se levantaba Absalón de mañana).

· Sabía donde posicionarse (a un lado del camino junto a la puerta).

· Buscaba a personas atribuladas (a cualquiera que tenía pleito).

· Se acercó a personas atribuladas (Absalón le llamaba).

· Tomó un interés personal en la persona atribulada (¿De qué ciudad eres?).

· Mostraba compasión a la persona (Mira, tus palabras son buenas y justas).

· Nunca atacó a David directamente (no tienes quien te oiga de parte del rey).

· Dejaba a la persona atribulada más atribulada (no tienes quien te oiga de parte del rey).

· Sin atacar a David directamente, Absalón prometió ser mejor. (¡Quién me pusiera por juez en la tierra, para que viniesen a mí todos los que tienen pleito o negocio, que yo les haría justicia!)

ii. El astuto enfoque de Absalón lo hizo capaz de subvertir y dividir el reino de David sin decir ninguna cosa específica que lo condenara. Si alguien objetaba Absalón simplemente diría, “Dime alguna cosa específica que haya dicho o hecho.” De hecho, Absalón podía hacer todo esto y decir, “Estoy ayudando a David a lidiar con todo este descontento ” mientras que en realidad Absalón estaba realmente promoviendo el descontento.

iii. David fue el más grande rey de Israel – e Israel se volvió insatisfecho con él y dejó que un hombre perverso y amoral se robara sus corazones. Hay muchas razones por las que esto sucedió.

· David estaba envejeciendo.

· Los pecados de David redujeron su prestigio.

· A la gente le gusta el cambio y Absalón era emocionante.

· Absalón era muy hábil y astuto.

· David tenía que entrar en la participación de sus sufrimientos y ser rechazado como lo sería también después el Hijo de David.

iv. “He aquí un rey, el más grande que jamás haya existido, un político profundo, un general capaz, un soldado valiente, un poeta del más sublime en genio y carácter, un profeta del Más Grande Dios, y el libertador de su país, alejado de sus dominios por su propio hijo, abandonado por su inconstante pueblo.” (Clarke)

v. Podríamos decir que el pecado más grande de Absalón fue la impaciencia. Absalón “parecía ser el más cercano al trono; pero su pecado fue, buscar obtenerlo mientras su padre seguía con vida, y que intentó destronarlo para sentarse en su lugar.” (Clarke)

2. (2 de Samuel 15:7-10) Absalón planea derrocar al reino de David.

Al cabo de cuatro años, aconteció que Absalón dijo al rey: Yo te ruego me permitas que vaya a Hebrón, a pagar mi voto que he prometido a Jehová. Porque tu siervo hizo voto cuando estaba en Gesur en Siria, diciendo: Si Jehová me hiciere volver a Jerusalén, yo serviré a Jehová. Y el rey le dijo: Ve en paz. Y él se levantó, y fue a Hebrón. Entonces envió Absalón mensajeros por todas las tribus de Israel, diciendo: Cuando oigáis el sonido de la trompeta diréis: Absalón reina en Hebrón.

a. Al cabo de cuatro años: En la Nueva Versión King James, en inglés, se mencionan cuarenta años (N. del T.), tal vez esta era la edad de Absalón en ese momento, pero algunos creen que es una pequeña corrupción del texto y que debe decir cuatro años basándose en los escritos de las traducciones Siriaca y Árabe, Josefo, y algunos manuscritos Hebreos.

b. Yo te ruego me permitas que vaya a Hebrón, a pagar mi voto que he prometido a Jehová: Absalón cometió traición con el pretexto de que iba a adorar. El sabía que la apariencia de espiritualidad podía actuar en su favor.

i. Es posible – tal vez probable – que haya hecho todo esto sintiendo que era espiritual y que estaba dentro de la voluntad de Dios. Los hombres en la posición de Absalón a menudo se engañan a sí mismos con palabras como estas: “Señor, tu sabes que necesitamos nuevo liderazgo. Gracias por levantarme para un tiempo como este. Guíame y bendíceme, oh Señor, mientras me esfuerzo por hacer lo que es mejor para tu pueblo.”

ii. Las personas que provocan división casi nunca se ven a sí mismas como provocadoras de división. Se ven a sí mismas como defensoras de la justa causa de Dios y a menudo creen o esperan que la mano de Dios esté con ellos. Este es un problema especialmente cuando otros solo creerán que una persona provoca división si ellos llegan a admitir que ellos provocan división.

c. Ve en paz: Irónicamente, estas fueron las últimas palabras de David para Absalón. Después de escuchar esto, Absalón se fue para llevar a cabo su conspiración para derrocar al reino de David.

d. Absalón reina en Hebrón: Absalón tenía la esperanza de que la mayoría de Israel viera esto como una sucesión y no como una traición.

3. (2 de Samuel 15:11-12) Legitimidad para el gobierno de Absalón.

Y fueron con Absalón doscientos hombres de Jerusalén convidados por él, los cuales iban en su sencillez, sin saber nada. Y mientras Absalón ofrecía los sacrificios, llamó a Ahitofel gilonita, consejero de David, de su ciudad de Gilo. Y la conspiración se hizo poderosa, y aumentaba el pueblo que seguía a Absalón.

a. Y fueron con Absalón doscientos hombres de Jerusalén: Absalón sabiamente supo que necesitaría de otros para respaldar – o por lo menos aparentar que se respaldaba – su gobierno. Él contaba con que estos doscientos hombres que no estaban en contra de David por lo menos permanecieran callados y por lo tanto dieran la impresión de que estaban con Absalón.

i. Cuando los inocentes y los ignorantes se encuentran entre los que provocan división, su silencio es siempre recibido como que están de acuerdo.

b. Llamó a Ahitofel gilonita, consejero de David: El gobierno de Absalón obtuvo más prestigio cuando uno de los asistentes principales de David desertó y se pasó a su lado. Esto realmente lastimó a David; él describió sus sentimientos en el Salmo 41: Aun el hombre de mi paz, en quien yo confiaba, el que de mi pan comía, alzó contra mí el calcañar (Salmos 41:9).

i. Ahitofel era reconocido por su sabiduría y su sabio consejo (2 de Samuel 16:23). Incluso los hombres sabios pueden tomar el lado de los líderes destructivos y que provocan división. En el caso de Ahitofel probablemente fue provocado por un sentido de daño personal y amargura debido a lo que David le hizo a su nieta Betsabé (2 Samuel 11:3 and 23:34).

c. Mientras Absalón ofrecía los sacrificios: Absalón tuvo cuidado de continuar con sus prácticas religiosas, por el bien de su imagen y debido a que estaba lo suficientemente engañado como para pensar que Dios querría bendecirlo.

d. Y la conspiración se hizo poderosa: Una vez que unos cuantos comenzaron a pasarse a lado de Absalón, esto alentó a más y más a hacerlo. El impulso para la división se da porque otros lo están haciendo.

B. David escapa con la ayuda de amigos fieles.

1. (2 de Samuel 15:13-18) David huye de Jerusalén.

Y un mensajero vino a David, diciendo: El corazón de todo Israel se va tras Absalón. Entonces David dijo a todos sus siervos que estaban con él en Jerusalén: Levantaos y huyamos, porque no podremos escapar delante de Absalón; daos prisa a partir, no sea que apresurándose él nos alcance, y arroje el mal sobre nosotros, y hiera la ciudad a filo de espada. Y los siervos del rey dijeron al rey: He aquí, tus siervos están listos a todo lo que nuestro señor el rey decida. El rey entonces salió, con toda su familia en pos de él. Y dejó el rey diez mujeres concubinas, para que guardasen la casa. Salió, pues, el rey con todo el pueblo que le seguía, y se detuvieron en un lugar distante. Y todos sus siervos pasaban a su lado, con todos los cereteos y peleteos; y todos los geteos, seiscientos hombres que habían venido a pie desde Gat, iban delante del rey.

a. Levantaos y huyamos, porque no podremos escapar delante de Absalón: David sabía bien que Absalón era un hombre despiadado que valoraba más el poder que la moral. Él no quería que la ciudad de Jerusalén se convirtiera en un campo de batalla (hiera la ciudad a filo de espada), así que huyó de la ciudad.

b. Del rey... el rey... el rey: Aquí el escritor quiso hacer hincapié en que David era el rey, pese a la traición de Absalón.

c. Y dejó el rey diez mujeres concubinas, para que guardasen la casa: David pensó- y tenía razón para pensar – que estas diez mujeres se quedarían sin peligro. Sintió que necesitaba que alguien cuidara de la casa.

i. Tristemente, esto también nos dice que David tenía por lo menos diez concubinas. Una concubina era esencialmente una amante legal. A parte de las muchas esposas de David, esto muestra que David era un hombre que a veces era indulgente con sus pasiones en vez de refrenarlas como un hombre de Dios.

d. Con todos los cereteos y peleteos: Estos hombres conformaban la guardia personal de David. Los Geteos lo seguían fielmente desde el tiempo en el que vivió entre los Filisteos (que habían venido a pie desde Gat). Estos hombres que habían sido fieles a David antes de que se volviera exitoso también se quedaron con él después de que el éxito parecía desvanecerse.

i. Es increíble que en este momento tan significativo de la última parte de su reinado, extranjeros se unieran a David. Es aún más increíble – y trágico – que sus propios compatriotas y su propia familia no se encontrara por ningún lado.

e. Iban delante del rey: Mientras David veía a esta procesión dejar Jerusalén, alejándose para ponerse a salvo, se sentía muy dolido. Esto se reflejó en el Salmo que David escribió durante este tiempo.

i. David tenía miedo: Mi corazón está dolorido dentro de mí, Y terrores de muerte sobre mí han caído. Temor y temblor vinieron sobre mí, Y terror me ha cubierto. Y dije: ¡Quién me diese alas como de paloma! Volaría yo, y descansaría. Ciertamente huiría lejos; Moraría en el desierto. Me apresuraría a escapar del viento borrascoso, de la tempestad. (Salmos 55:4-8)

ii. David puso su confianza en Dios: ¡Oh Jehová, cuánto se han multiplicado mis adversarios! Muchos son los que se levantan contra mí. Muchos son los que dicen de mí: No hay para él salvación en Dios. Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí; Mi gloria, y el que levanta mi cabeza. Con mi voz clamé a Jehová, y él me respondió desde su monte santo. Yo me acosté y dormí, y desperté, porque Jehová me sustentaba. No temeré a diez millares de gente, que pusieren sitio contra mí. (Salmos 3:1-6)

iii. Los Salmos 41, 61, 62 y 63 también fueron escritos durante este periodo.

2. (2 de Samuel 15:19-23) Los leales amigos de David.

Y dijo el rey a Itai geteo: ¿Para qué vienes tú también con nosotros? Vuélvete y quédate con el rey; porque tú eres extranjero, y desterrado también de tu lugar. Ayer viniste, ¿y he de hacer hoy que te muevas para ir con nosotros? En cuanto a mí, yo iré a donde pueda ir; tú vuélvete, y haz volver a tus hermanos; y Jehová te muestre amor permanente y fidelidad. Y respondió Itai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor el rey, que o para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo. Entonces David dijo a Itai: Ven, pues, y pasa. Y pasó Itai geteo, y todos sus hombres, y toda su familia. Y todo el país lloró en alta voz; pasó luego toda la gente el torrente de Cedrón; asimismo pasó el rey, y todo el pueblo pasó al camino que va al desierto.

a. ¿Para qué vienes tú también con nosotros? Mientras David observaba la procesión de sus fieles seguidores Itai geteo llamó su atención. David no podía entender porque este extranjero recién llegado tomaba el riesgo de tal abierta lealtad a David.

b. Vuélvete y quédate con el rey: Al llamar a Absalón el rey, David mostró que no pensaba aferrarse al trono. En ese momento parecía que Absalón triunfaría, así que David lo llamó el rey y lo dejó en manos de Jehová.

c. Vive Dios, y vive mi señor el rey: Itai se refirió a David, no a Absalón. David le dijo a Itai, “quédate con el rey.” Itai le respondió, “Eso es exactamente lo que pienso hacer – tú eres el rey.”

d. Para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo: Itai fue leal a David cuando parecía algo certero que le costaría algo. La verdadera lealtad no se demuestra hasta que es probable que ser leal cueste algo.

i. “Recuerden, mientras más rebeldes haya, más necesidad hay de que seamos visiblemente leales a nuestro Rey.” (Maclaren)

ii. Aprendemos mucho de la demostración de lealtad de Itai.

· Itai lo hizo cuando David estaba caído.

· Itai lo hizo decisivamente.

· Itai lo hizo voluntariamente.

· Itai lo hizo habiendo venido recientemente a David.

· Itai lo hizo públicamente.

· Itai lo hizo sabiendo que el destino de David sería su destino.

iii. “Si Itai, cautivado por la persona y el carácter de David, a pesar de ser un forastero y un extraño, creyó que podía enlistarse bajo su bandera de por vida – sin duda, y declarando que lo haría en ese momento y en ese lugar- cuánto más lo podremos hacer usted y yo, si sabemos lo que Cristo ha hecho por nosotros, y Quién es, y lo que merece de nuestras manos, a esta buena hora declarémosle nuestra lealtad y juremos, ‘Vive Jehová, ciertamente que en cualquier lugar mi Señor y Salvador será, si en la muerte o en la vida, incluso ahí su siervo seré.’ ” (Spurgeon)

iv. Debemos determinar que dondequiera que Jesús esté, nosotros también estaremos ahí. Si él vive en los lugares celestiales, también lo haremos nosotros. Si está en la iglesia, también lo estaremos nosotros. Si está ocupado en el trabajo, también lo estaremos nosotros. Si él está con los niños. También lo estaremos nosotros.

e. Pasó al camino que va al desierto: Muchos años atrás, David dejó la seguridad del palacio de Saúl para vivir como fugitivo. Esos años en el desierto prepararon a David para ser rey. Dios envió a David al desierto para continuar con el mismo trabajo en su vida.

i. “¡Ah! No nos gusta ir a Cedrón. ¡Cuando se trata de la pizca, de cómo batallamos contra el sufrimiento y especialmente contra la deshonra y la calumnia! Cuántos no hubo que hubieran ido en peregrinación, pero que cuando el Señor vergüenza demostró ser demasiado para ellos; No pudieron ir sobre el arroyo negro de Cedrón, no pudieron soportar nada por el Señor de la gloria, sino que incluso se volvieron atrás.” (Spurgeon)

3. (2 de Samuel 15:24-26) La sujeción de David al castigo de Dios.

Y he aquí, también iba Sadoc, y con él todos los levitas que llevaban el arca del pacto de Dios; y asentaron el arca del pacto de Dios. Y subió Abiatar después que todo el pueblo hubo acabado de salir de la ciudad. Pero dijo el rey a Sadoc: Vuelve el arca de Dios a la ciudad. Si yo hallare gracia ante los ojos de Jehová, él hará que vuelva, y me dejará verla y a su tabernáculo. Y si dijere: No me complazco en ti; aquí estoy, haga de mí lo que bien le pareciere.

a. También iba Sadoc, y con él todos los levitas que llevaban el arca del pacto de Dios: Los sacerdotes eran leales a David, a pesar de que probablemente significaría la muerte para ellos en caso de que Absalón tuviera éxito. Era bueno que los hombres que debían ser espiritualmente sensibles a la maldad de Absalón y al bien de David fueran realmente sensibles a ello.

b. Vuelve el arca de Dios a la ciudad: David confiaba en Dios, no en el arca del pacto. Estaba dispuesto a dejar que el arca regresara a Jerusalén y poner su destino en manos de Dios.

c. Si yo hallare gracia ante los ojos de Jehová, él hará que vuelva... Y si dijere: No me complazco en ti; aquí estoy, haga de mí lo que bien le pareciere: El humilde y disciplinado corazón de David probó que sabía que Dios lo trataba justamente. David se sometió a Dios con una sujeción activa, no una pasiva.

4. (2 de Samuel 15:27-29) David envía a los sacerdotes de regreso para obtener información.

Dijo además el rey al sacerdote Sadoc: ¿No eres tú el vidente? Vuelve en paz a la ciudad, y con vosotros vuestros dos hijos; Ahimaas tu hijo, y Jonatán hijo de Abiatar. Mirad, yo me detendré en los vados del desierto, hasta que venga respuesta de vosotros que me dé aviso. Entonces Sadoc y Abiatar volvieron el arca de Dios a Jerusalén, y se quedaron allá.

a. ¿No eres tú el vidente? David reconocía que Sadoc era un profeta. Un hombre con percepción sobrenatural podía ser una valiosa fuente de información para David.

5. (2 de Samuel 15:30) David en el Monte de los Olivos.

Y David subió la cuesta de los Olivos; y la subió llorando, llevando la cabeza cubierta y los pies descalzos. También todo el pueblo que tenía consigo cubrió cada uno su cabeza, e iban llorando mientras subían.

a. Y David subió la cuesta de los Olivos: Cuando Jesús fue de la última Cena al Huerto de Getsemaní para orar, esencialmente siguió los mismos pasos de David. Tanto David como Jesús sufrieron por el pecado, pero Jesús sufrió por nuestros pecados mientras que David sufrió por los propios.

b. Y la subió llorando, llevando la cabeza cubierta y los pies descalzos: Estos eran símbolos de luto. David fue golpeado por la grandeza de la tragedia para la nación, para su familia, y para sí mismo.

i. Esta no era una reunión para compadecerse o dolerse solamente por las consecuencias de su pecado.”Él está devastado porque sabe que su castigo es merecido – el amargo fruto del pecado que llenó toda la última parte de su vida con oscuridad. Su valor y su optimismo lo habían dejado.” (Maclaren)

ii. “A la luz de todos los hechos casi podemos asegurar que las lágrimas que derramó David mientras subía los Olivos, eran más bien de humillación y penitencia, que de arrepentimiento centrado en sí mismo. Para Absalón no había ninguna excusa, pero David llevó sin cesar en su propio corazón el sentido de su propio pecado pasado.” (Morgan)

iii. Esto muestra que David era un hombre redimido. Algunos dirían que Dios absolvió a David con mucha facilidad – que merecía la pena de muerte por adulterio y asesinato. Si Dios lo perdonaba y lo libraba de esa pena, seguramente David simplemente lo volvería a hacer. Aquellos que piensan de esta manera no entienden cómo la gracia y el perdón trabajan en el corazón de los redimidos. El pecado de David estuvo siempre delante de él- y en una extraña combinación de profunda gratitud y horror por su pecado perdonado, David nunca lo volvió a hacer.

6. (2 de Samuel 15:31-37) David se entera de que Ahitofel se ha pasado al lado de Absalón.

Y dieron aviso a David, diciendo: Ahitofel está entre los que conspiraron con Absalón. Entonces dijo David: Entorpece ahora, oh Jehová, el consejo de Ahitofel. Cuando David llegó a la cumbre del monte para adorar allí a Dios, he aquí Husai arquita que le salió al encuentro, rasgados sus vestidos, y tierra sobre su cabeza. Y le dijo David: Si pasares conmigo, me serás carga. Mas si volvieres a la ciudad, y dijeres a Absalón: Rey, yo seré tu siervo; como hasta aquí he sido siervo de tu padre, así seré ahora siervo tuyo; entonces tú harás nulo el consejo de Ahitofel. ¿No estarán allí contigo los sacerdotes Sadoc y Abiatar? Por tanto, todo lo que oyeres en la casa del rey, se lo comunicarás a los sacerdotes Sadoc y Abiatar. Y he aquí que están con ellos sus dos hijos, Ahimaas el de Sadoc y Jonatán el de Abiatar; por medio de ellos me enviaréis aviso de todo lo que oyereis. Así vino Husai amigo de David a la ciudad; y Absalón entró en Jerusalén.

a. Entorpece ahora, oh Jehová, el consejo de Ahitofel: David sabía que Ahitofel normalmente era un buen consejero, pero oró para que diera sus consejos para Absalón fueran entorpecidos.

i. “Esto fue hecho como corresponde: grande es el poder del que ora fielmente. A la reina madre de Escocia se le escuchó decir, que temía mucho más a las oraciones de John Knox que a un ejército de guerreros.” (Trapp)

b. Cuando David llegó a la cumbre del monte para adorar allí a Dios: La vida de David estaba en peligró y tuvo que huir. Sin embargo se tomó el tiempo para detenerse en el Monte de los Olivos, ver a Jerusalén y al tabernáculo, y adorar allí a Dios. David sabía que la adoración siempre era importante y podía adorar cuando las circunstancias eran malas.

b. Entonces tú harás nulo el consejo de Ahitofel.: David envió a su otro asistente Husai de regreso a Jerusalén para frustrar el consejo de Ahitofel para Absalón.

c. Absalón entró en Jerusalén: Absalón llegó a Jerusalén como un rebelde astuto y perverso. David llegó a Jerusalén como un valiente y noble conquistador (2 de Samuel 5:6-7). Jesús llegó a Jerusalén como un rey servidor (Mateo 21:4-10).

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